Salida dominical a Zaragoza para disputar un encuentro importante tras la derrota de la semana pasada ante Urdúliz y que los chicos de Sergio Moracho querían resarcir y traerse los puntos a Villava/Atarrabia, pero como suele decirse, una cosa cosa es querer y otra muy distinta poder.

Inicio de partido, de tanteo, con dudas por ambos bandos pero con ligera iniciativa de los locales que mantenían mínimas ventajas a su favor. A lo largo de la primera mitad nadie conseguía marcharse en el luminoso, gracias a Xabier Iturralde que en la linea de seis metros se fajaba con la defensa maña y hacía daño, así como Eneko Asurabarrena y Lander Etxarri. Por parte local, Cristian Carrillo y Cristi Riurescu eran los estiletes ofensivos de los locales. Con 11-9, los de Moracho conseguían empatar a 11 goles y de ahí al final del primer acto se llegaba con un esperanzador 14-13 y las espadas en todo lo alto.

Cinco minutos de toma y daca al inicio de la segunda mitad, y parcial de 5-2 para los maños que desarbolaban un poco a los navarros, aunque no perdían la cara de la mano de Asier Pedroarena. Una exclusión a Sergio Moracho al filo del minuto 40 trastocaba los planes visitantes, pero sabían aguantar para llevar a la mínima expresión el resultado a falta de 15’. Beti Onak caía en un pequeño bache que propiciaba un acelerón de los de Zaragoza hasta el final del encuentro manteniendo rentas de 3/4 goles llegando al final de los sesenta minutos con un 33-30 para Dominicos que puede considerarse justo.

Ahora toca descansar hasta el 10 de abril en el que los de Villava recibirán a otro equipo de Zaragoza, que no es otro que el Estudio Matmata BM Zaragozan Ademar dirigido por el gran Ambros Martín.

Imagen destacada: Beti Onak

@jokinelizari